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lunes, 11 de agosto de 2014

El “Homo Empresarius Innovectus (HEI)”

El “Homo Empresarius Innovectus (HEI)”

Por Rafael Corona Funes*





¿Qué es un HEI?
El Homo Empresarius Innovectus (HEI) pertenece a la especie
humana y se distingue por sus capacidades Intuitivas y
creativas; Novedosas y sorprendentes; Notorias y
diferenciadoras; Orientadoras y retadoras; Viables y
evaluadoras; Activas y operativas; Concentradoras y enfocadas;
Ingeniosas e imaginativas; Ordenadoras y metódicas; y Naturales
y sencillas, para innovar.
Utiliza el cerebro cortical. Éste, es la "cubierta cerebral” más
joven desde el punto de vista evolutivo. Encargada de los
procesos de pensamiento abstracto y la creatividad; así como, de
los procesos que inhiben las reacciones primarias promovidas por
las instancias cerebrales más arcaicas (reptilianas y límbicas).
CEREBRO REPTILIANO
Instinto
Agresividad 
Huida
CEREBRO LÍMBICO
Emoción
Placer
Recompensa
Cólera
Miedo
CEREBRO CORTICAL
Pensamiento Abstracto
Análisis
Razonamiento
Imaginación
Creatividad
Adaptación

Su comportamiento es social y emprendedor; trabaja en equipo y
lidera proyectos estratégicos; negocia bajo el principio ganar-
ganar y sustenta sus acciones en planes de negocio; analiza a
sus competidores e identifica oportunidades de innovación;
desarrolla nuevos productos y cambia las reglas de la
competencia en los mercados en los que participa; no es egoísta
y comparte los beneficios generados entre sus socios y
colaboradores; le gusta reír, jugar, hacer ejercicio, comer bien
y facilita la felicidad de su familia; es una fuente de
inspiración para sus hijos y ama profundamente a su pareja.

¿De dónde surge el HEI?
Su origen se ubica en la era cenozoica, del periodo cuaternario
en la época del holoceno; su antecedente es el homo sapiens-
sapiens. La globalización y las crisis económicas recurrentes,
lo han fortalecido y lo han hecho un ser excepcionalmente
creativo y emprendedor.

Desde su origen, ha habido “depredadores” que han hecho lo
posible por desaparecerlo de la faz de la tierra. Entre éstos,
destacan la apatía, la desmotivación, el desinterés y la burla;
así como, los altos impuestos, las barreras a la entrada, la
corrupción y los monopolios. Estos últimos, concentran la
riqueza generada, evitan la sana competencia y menosprecian la
democratización de los procesos de innovación en las pequeñas y
medianas empresas.

El HEI ha sobrevivido a gobiernos incompetentes, a procesos
educativos arcaicos, a tecnologías con precios inalcanzables, a
créditos con altas tasas de interés y a la soberbia de las
grandes empresas.

Su difícil evolución lo ha llevado a ser la especie que promueve
el cambio económico, social, político, cultural, científico y
tecnológico a contra-corriente; esta situación, lo ha puesto en
la punta de la pirámide evolutiva.

Se alimenta de ideas, investigaciones, intercambio de puntos de
vista, experimentos, prototipos y errores; estos últimos, han
sido las vitaminas, proteínas y minerales que le han permitido
capitalizar sus experiencias.

¿Cómo ha evolucionado el HEI?
Gracias a su alimentación balanceada, ha sido capaz de
evolucionar hasta transformarse en la “piedra filosofal” de la
empresa moderna; las herramientas que utiliza, las construyó con
su “mente de obra” a través de muchos años de “prueba y error”;
su metodología de trabajo es infalible: persistencia,
persistencia y persistencia.
Con base en los más recientes descubrimientos, podemos afirmar
que su proceso evolutivo transitó por tres etapas: a) la etapa
primitiva (sintetizada en la famosa frase: “no inventes, ya todo
está creado”), b) la etapa de desarrollo (sintetizada en la
famosa frase: “si no funciona, estas fuera de la organización”)
y c) la etapa de madurez (sintetizada en la famosa frase: “que
nuevas ideas tenemos para diferenciarnos de los competidores”).
Como podemos apreciar no todo ha sido “miel sobre hojuelas” para
el HEI.
Durante su proceso evolutivo, ha estado a punto de la extinción;
sobre todo, cuando algunos directores generales han dado
prioridad a las estrategias tradicionales de sobrevivencia. Este
fenómeno empresarial, dejó fuera del mercado a muchos pequeños y
medianos negocios y creó un enorme desempleo de HEI´s; no
obstante, algunos de éstos, se refugiaron en cubículos
universitarios y oficinas obscuras y frías donde siguieron dando
rienda suelta a su imaginación y creatividad; hoy, algunos HEI
´s, empiezan a salir a la superficie terrestre de la empresa
moderna y el sol de la oportunidad fortalece sus huesos,
músculos y cartílagos.
Es digno mencionar que su proceso evolutivo continúa; cada vez
es más claro observar su futuro exitoso.

¿Qué características tiene el HEI?
La evolución del HEI ha provocado cambios significativos en su
enfoque estratégico; es decir, ahora el HEI es capaz de: a)
aprender a aprender rápidamente, b) aprender a pensar con
profundidad, c) aprender a crear cosas nuevas y diferentes, d)
aprender a tomar decisiones con base en información estratégica,
e) aprender a trabajar en equipo empáticamente y f) aprender a
emprender calculando riesgos y beneficios.

Estas características son naturales y le han generado amplias
ventajas competitivas sobre los antiguos homo sapiens-sapiens.
Según observaciones directas de algunos investigadores, los HEI
´s prefieren ser el “tonto” en el grupo de “inteligentes” y no
el “inteligente” en el grupo de “tontos”.

Esta situación, los ha puesto en una posición de fortaleza y
humildad. Son fuertes, porque ellos son los que hacen las
preguntas y, son humildes, porque escuchan y observan los
opiniones de los demás y sus comportamientos.

Los HEI´s son capaces de visualizar creativamente el futuro;
analizan tendencias y hacen proyecciones, identifican con
claridad las fortalezas y debilidades de la empresa, construyen
estrategias para consolidar las primeras y eliminar las segundas
y, enfocan sus esfuerzos de innovación, hacia la diferenciación
en el mercado y el incremento de las utilidades.

¿Qué motivaciones mueven al HEI?
La principal motivación de los HEI´s es romper paradigmas,
romper con lo tradicional, romper con el pasado y romper con las
reglas de competencia establecidas. Son innovadores naturales.
No obstante son metódicos, competentes, responsables y
confiables.

Se les ha visto en pequeños grupos, discutiendo e intercambiando
puntos de vista hasta el cansancio; de igual manera, se les ha
sorprendido meditando en silencio y, a algunos de ellos,
hablando solos.

Cuando organizan reuniones de trabajo, preparan presentaciones
que sorprenden por el detalle y la claridad de ideas; permiten
que otros hablen y expresen sus pensamientos y sentimientos con
precisión; definen objetivos y tiempos para realizar sus
reuniones de trabajo y, llegan a conclusiones definitivas, sobre
las innovaciones planteadas.

Según recientes investigaciones, los HEI´s tienen una alta
autoestima y siempre encuentran el motivo para volver acción su
pensamiento; lo cual, estimula el pensamiento y la acción de los
homo sapiens-sapiens que los rodean.

¿Qué busca el HEI?
El HEI tiene un objetivo muy claro: innovar. El HEI comprende
con precisión la diferencia que existe entre innovar, inventar,
imaginar, descubrir, mejorar, rediseñar y crear.
Innovar, es hacer algo diferente y superior con base en los
conocimientos, experiencias y recursos disponibles, para
satisfacer una necesidad de manera práctica y altamente
rentable. “Mudar o alterar algo, introduciendo novedades”
(Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española).
Inventar, es pensar en algo o hacer algo con base en los
conocimientos y experiencias disponibles. Sin estar orientado a
satisfacer una necesidad específica ni ser utilizado de manera
práctica y rentable. “Imaginar, fingir” (Diccionario de la Real
Academia de la Lengua Española).
Imaginar, es pensar en algo sin un sustento sólido, conocimiento
o experiencia concreta. “Representar idealmente algo,
inventarlo, crearlo en la imaginación” (Diccionario de la Real
Academia de la Lengua Española).
Descubrir, es encontrar algo que ya existía. “Hallar lo que
estaba ignorado o escondido” (Diccionario de la Real Academia de
la Lengua Española).
Mejorar, es hacer bien y desde la primera vez (sin error,
desperdicio ni re-proceso) lo que siempre se ha hecho, con base
en los recursos disponibles para satisfacer una necesidad de
manera rentable. “Adelantar, acrecentar algo, haciéndolo pasar a
un estado mejor” (Diccionario de la Real Academia de la Lengua
Española).
Rediseñar, es hacer algo de manera diferente para reducir costos
de operación y elevar las utilidades.
Crear, es hacer algo nuevo sin considerar los conocimientos,
experiencias y recursos disponibles. “Producir algo de la nada”
(Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española).

¿Qué resultados genera un HEI?
El HEI genera resultados espectacularmente innovadores y
rentables. Algunos antropólogos han descubierto su especial
talento para generar resultados con base en sus errores
cometidos. El HEI es un incansable generador de “errores” y
experiencias “fallidas”; éstas, lo han hecho evolucionar hacia
un Homo con alta tolerancia a la frustración.

Sin embargo, esos mismos antropólogos, han afirmado que en
muchas ocasiones el HEI no está del todo satisfecho con sus
resultados generados; este fenómeno, le provoca un sentimiento
de reto constante y continuo, el cual transmite con entusiasmo a
otros homo sapiens-sapiens.

El HEI entiende el concepto resultado desde diferentes ópticas.
Éstas van, desde un resultado altamente rentable, hasta un acto
francamente fallido; todos ellos son resultados. Algunos muy
deseados y otros indeseables, pero a fin de cuentas resultados.

¿Cuál es el futuro inmediato del HEI?
El HEI, como lo hemos dicho arriba, tiene un futuro exitoso.
Muchas empresas lo aprecian y la sociedad demanda su
participación activa para el desarrollo y crecimiento de la
economía.

Muchas universidades e instituciones de educación superior lo
están formando y haciendo evolucionar; sin embargo, muchos de
estos Homo Empresarius Innovectus crecen al fragor de la batalla
cotidiana. Es decir, creando y desarrollando micro, pequeñas y
medianas empresas; así como, actividades independientes que lo
fortalecen y lo empujan hacia la punta de la pirámide evolutiva.

*Economista y consultor empresarial.
Email: rcf777@gmail.com
Página web: www.rcfconsultores.com